El arte de cuidar bien de uno mismo

Para lograr tus objetivos y disfrutar de las mejores cosas de tu vida tenés que estar en tus mejores condiciones.

No vas a llegar muy lejos si siempre estás cansado, agotado por los retos diarios o por el estrés. La Psicología Positiva, la neurociencia y la medicina en general han encontrado que las personas que son más saludables, felices y exitosas comparten una característica en particular: un nivel alto de “estamina” o “energía”.

Algunos autores definen la “estamina” como el “vigor” o la habilidad de sostener un esfuerzo físico o mental prolongado; también se puede definir como la fortaleza, la resistencia y determinación que se requiere para cumplir con nuestros retos a largo plazo como: los proyectos de trabajo, los estudios y las responsabilidad y el esfuerzo que conlleva la crianza de los hijos.

Para lograr estar más alertas, recuperar nuestro “vigor” y mantener nuestro entusiasmo por la vida necesitamos cuidar de nuestro cuerpo, nuestra energía y nuestro bienestar de manera continua.

3 Principios fundamentales de auto-cuidado que contribuyen a un funcionamiento óptimo:

Principio 1 – Renovación y Descanso

Dormir bien: El descanso es el paso número uno para un funcionamiento óptimo, nada sustituye 7hrs de sueño como mínimo. De hecho el Dr. Daniel Amen autor de “Change your Brain, Change your life” asegura que la falta de sueño nos hace tomar decisiones poco inteligentes o pobres para nuestras vidas; y de hecho, si se les preguntara a los candidatos en una entrevista de trabajo cuanto duermen en promedio, sus respuestas podrían revelar mucho sobre sus niveles de concentración y estados de ánimo.

Tomar “breaks” o “descansos” de 5 min por cada hr de trabajo: mantiene nuestro cerebro alerta e incrementa nuestra creatividad. Pararse por una taza de café, tomar aire o mirar por una ventana funciona bien para distraerse y recuperar la energía y el enfoque.

Oscilar entre recreación y trabajo: Para manejar el estrés es importante aprender a oscilar entre las responsabilidades, retos y problemas y, los momentos de recreación y entretenimiento; ya que el enfocar nuestra atención en otra cosa, distraernos, reírnos o cambiar nuestro estado emocional, aunque sea temporalmente, nos ayuda a “soltar” la carga que nos produce la presión constante de la vida diaria.

Principio 2 – Alimentación e Hidratación

Mantenerse hidratado: tiene un efecto positivo en nuestra salud, 8 vasos de agua al día es un buen inicio. Otra sugerencia es bajar el consumo de la cafeína y las bebidas carbonatadas, su restricción puede contribuir a vivir más sanamente.

No abusar: de los azúcares, los alimentos procesados y de las grasas. Lo mejor es alimentarse balanceadamente combinando todos los grupos de alimentos; tratando incorporar a las comidas frutas, verduras y granos.

Comer a la hora apropiada: y no saltarse las comidas o “malpasarse”, esto puede llegar a afectar hasta tu “humor”. Algunos expertos recomiendan 5 comidas al día para ayudarte a mantener un buen nivel de energía durante el día.

Principio 3 – Ejercicio y Movimiento

30 min de ejercicio: al día ayudan a mantener el cuerpo en forma y además se ha encontrado que es un excelente anti-depresivo natural.

Disciplina: A nivel psicológico y emocional tienen sus ventajas ya que las personas que llevan comprometidas más de un año con algún tipo de ejercicio llegan a experimentar un efecto positivo en su auto-estima y en su sentido de logro.

Sensación de bienestar: Hacer ejercicio tienen un efecto directo en el estado de ánimo, en la manera en la que trabaja nuestro cuerpo y además mejora nuestra salud física e intelectual porque nos permite estar más alertas, elimina toxinas y activa diferentes centros de aprendizaje en nuestro cerebro.

Fuente: Self-Nurture: Learning to Care for Yourself As Effectively As You Care for Everyone Else by Alice D. Domar, PhD, and Henry Dreher (Penguin, 2001).