Casi todos tenemos esa idea, más bien anhelo, ya que no sabemos nada de nada sobre que es lo que nos pasará en una horas, mucho menos mañana, el otro año o cuando finalicemos tal o cual etapa.
Nos cuesta tanto amarnos a nosotros mismos de la misma forma que encontrar el modo de hacerlo. Estamos en busca de la felicidad y entonces giramos las cosas, volteamos patas para arriba nuestro mundo, cuestionamos intelectualmente cualquier huevada; nos ponemos positivos un día y ya creemos que los siguientes vendrán sólos con el mismo tinte. Somos seres vagos, ignorantes, autolimitados y nos encanta vivir del sueño del mañana.
Alguien se encargó muy bien de tildarnos de culpables, de incrustarnos la idea que un día seremos perdonados y nos tendrán misericordia si hacemos esto o aquello de tal forma. Entonces vivimos nuestro aliento frustrados, angustiados, débiles y tratando de controlar la tolerancia y la ansiedad, las cuales, primero nos van a matar emocionalmente y luego físicamente. Nos dejarán inservibles de verdad.
Vivimos nuestro presente esperando ese gran día del paraíso, ese día de los sueños cumplidos, ese ansiado momento de ser perdonados y entrar al mundo de la salvación. Esa idea se la ofrecemos poquito a poco a nuestra mente y ella obedientemente juzga todos nuestros actos bajo ese programa y, lógicamente, nos hace sentir infelices día tras día.
La vida de cada uno de nosotros es mejor hoy, ya, en este puto momento, en este hermoso momento, como quieras. Ya que no sabes cómo va a resultar mañana entonces disfruta hoy, reite hoy, amá hoy, discutí hoy, solucioná tus cosas ya. Hablá con quien debás hacerlo ya. La vida es tan espectacular que debería ser sólo para aquellos que se la merecen. Si la tenés... entonces valorala, valorándote, cuidándote y amándote con agallas. No seas cag@n !!
Decile a tu cabecita que sos capaz, que sos hermoso, que estás haciendo las cosas que querés, que sos afortunado porque tenés familia, porque podes compartir con amigos, porque tenes hijos amados y que sos una persona contenta, satisfecha que va en busca de otros niveles de satisfacción. Tu cabeza, cual músculo , luego de tantos pensamientos de este tipo, luego de que la entrenes de esta forma, te juzgará cada día como le suspiste decir que eras.
Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después ....Después de terminar la carrera, después de conseguir trabajo, después de casarnos, después de tener un hijo, y entonces después de tener otro.
Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes, y pensamos que seremos más felices cuando crezcan y dejen de ser niños, después nos desesperamos porque son adolescentes, difíciles de tratar.
Pensamos: seremos más felices cuando salgan de esa etapa.
Luego decidimos que nuestra vida será completa cuando a nuestro esposo o esposa le vaya mejor. Cuando tengamos un mejor coche, cuando nos podamos ir de vacaciones. Cuando consigamos el ascenso, cuando nos retiremos.
La verdad es que "NO HAY MEJOR MOMENTO PARA SER FELIZ QUE AHORA MISMO". Si no es ahora, ¿cuándo? La vida siempre estará llena de luegos, de retos. Es mejor admitirlo y decidir ser felices ahora de todas formas ...No hay un luego, ni un camino para la felicidad, la felicidad es el camino y es hoy.
Nos cuesta tanto amarnos a nosotros mismos de la misma forma que encontrar el modo de hacerlo. Estamos en busca de la felicidad y entonces giramos las cosas, volteamos patas para arriba nuestro mundo, cuestionamos intelectualmente cualquier huevada; nos ponemos positivos un día y ya creemos que los siguientes vendrán sólos con el mismo tinte. Somos seres vagos, ignorantes, autolimitados y nos encanta vivir del sueño del mañana.
Alguien se encargó muy bien de tildarnos de culpables, de incrustarnos la idea que un día seremos perdonados y nos tendrán misericordia si hacemos esto o aquello de tal forma. Entonces vivimos nuestro aliento frustrados, angustiados, débiles y tratando de controlar la tolerancia y la ansiedad, las cuales, primero nos van a matar emocionalmente y luego físicamente. Nos dejarán inservibles de verdad.
Vivimos nuestro presente esperando ese gran día del paraíso, ese día de los sueños cumplidos, ese ansiado momento de ser perdonados y entrar al mundo de la salvación. Esa idea se la ofrecemos poquito a poco a nuestra mente y ella obedientemente juzga todos nuestros actos bajo ese programa y, lógicamente, nos hace sentir infelices día tras día.
La vida de cada uno de nosotros es mejor hoy, ya, en este puto momento, en este hermoso momento, como quieras. Ya que no sabes cómo va a resultar mañana entonces disfruta hoy, reite hoy, amá hoy, discutí hoy, solucioná tus cosas ya. Hablá con quien debás hacerlo ya. La vida es tan espectacular que debería ser sólo para aquellos que se la merecen. Si la tenés... entonces valorala, valorándote, cuidándote y amándote con agallas. No seas cag@n !!
Decile a tu cabecita que sos capaz, que sos hermoso, que estás haciendo las cosas que querés, que sos afortunado porque tenés familia, porque podes compartir con amigos, porque tenes hijos amados y que sos una persona contenta, satisfecha que va en busca de otros niveles de satisfacción. Tu cabeza, cual músculo , luego de tantos pensamientos de este tipo, luego de que la entrenes de esta forma, te juzgará cada día como le suspiste decir que eras.
Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después ....Después de terminar la carrera, después de conseguir trabajo, después de casarnos, después de tener un hijo, y entonces después de tener otro.
Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes, y pensamos que seremos más felices cuando crezcan y dejen de ser niños, después nos desesperamos porque son adolescentes, difíciles de tratar.
Pensamos: seremos más felices cuando salgan de esa etapa.
Luego decidimos que nuestra vida será completa cuando a nuestro esposo o esposa le vaya mejor. Cuando tengamos un mejor coche, cuando nos podamos ir de vacaciones. Cuando consigamos el ascenso, cuando nos retiremos.
La verdad es que "NO HAY MEJOR MOMENTO PARA SER FELIZ QUE AHORA MISMO". Si no es ahora, ¿cuándo? La vida siempre estará llena de luegos, de retos. Es mejor admitirlo y decidir ser felices ahora de todas formas ...No hay un luego, ni un camino para la felicidad, la felicidad es el camino y es hoy.
¡¡AHORA, ATESORA CADA MOMENTO QUE VIVIS!! y atesóralo más porque lo compartiste con alguien especial; tan especial que lo llevas en tu corazón y recuerda que ¡¡ EL TIEMPO NO ESPERA POR NADIE!!
Así que deja de esperar hasta que termines la Universidad, hasta que te enamores, hasta que encuentres trabajo, hasta que te cases, hasta que tengas hijos, hasta que se vayan de casa, hasta que te divorcies, hasta que pierdas esos diez kilos, hasta el viernes por la noche o hasta el domingo por la mañana; hasta la primavera, el verano, el otoño o el invierno, o hasta que te mueras, para decidir que no hay mejor momento que justamente ¡ ÉSTE PARA SER FELIZ!
LA FELICIDAD ES UN TRAYECTO, NO UN DESTINO.
TRABAJA COMO SI NO NECESITARAS DINERO.
AMA COMO SI NUNCA TE HUBIERAN HERIDO.
Y BAILA ... COMO SI NADIE TE ESTUVIERA VIENDO.
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