jueves, julio 29, 2010

Comer placenta calma el dolor!

Luego del nacimiento, la placenta es expulsada pues ya no es útil para la madre. Sin embargo algunas culturas, al igual que muchos mamíferos, acostumbran a ingerirla sosteniéndo que esta no es carne proveniente de la muerte sino de la vida y entonces no sólo alimenta el cuerpo sino también el espíritu (los mamíferos que no hablan no se han podido dar a explicar).


Comer placenta después del parto se denomina placentofagia, se piensa que esta práctica ocurre naturalmente para evitar el dejar rastro del nacimiento de las crías y así prevenir el acecho de los depredadores.


En los humanos, obviamente no tiene nada que ver el hecho de evitar el rastro, sino más bien absorver grandes cantidades de oxitocina, la cual calma el estrés del parto y logra que los músculos que rodean las células mamarías se contraigan para sacar la leche.

De todas formas aunque muchos la reverencian, pocos la comen. Los que apoyan esta práctica en humanos, principalmente en EE.UU. y Europa, argumentan que comer la placenta ayuda a prevenir la depresión postparto y otras complicaciones.


Se dice que la placenta humana sabe muy parecida a la carne de res y tiene una textura elástica similar al corazón. Y para los que se animen a comerla debo decirles que existen infinidad de recetas para su preparación. Se la prepara salteadita con brócoli, a la naranja o bien en bolognesa para acompañar unos sabrosos fideos.

"Una práctica común en el norte de California y en el Reino Unido es dar una fiesta después del parto, llamada Placenta Party. En esta celebración, la madre o alguien que ella designe prepara una comida usando la placenta. Se cree que esta carne tiene poder o energía para compartir con los amigos y seres queridos" (wikipedia).



A mi me da una especie de repulsión y creo que se debe al hecho de saber que es carne humana, en todo caso prefiero un excelente ensalada nutritiva y colorida.



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