Caminamos por las calles con caras de perros rabiosos, elucubrando cálculos impositivos y de servicios, juzgando al que nos pasa al lado. Nos esforzamos, hasta el ridículo, por ser más adultos, más serios y mucho más congruentes y consecuentes. No soportamos el barullo en un recinto ni la música fuerte en un bar. Procuramos comer contando las calorías y viendo el númerito de los omegas. Tenemos explicaciones para todo y para todos. Uh! ya somos adultos.
La siguiente lista la he armado recurriendo a mis recuerdos, a lo leído vaya a saber dónde y a lo que realmente me motiva: ¡Jamás dejar de ser un niño!. La comparto con todos ustedes y si piensan que es un huevada, una cursilería o una niñada, yo les preguntaré: -¿y poqué? (no falta la "r").
La siguiente lista la he armado recurriendo a mis recuerdos, a lo leído vaya a saber dónde y a lo que realmente me motiva: ¡Jamás dejar de ser un niño!. La comparto con todos ustedes y si piensan que es un huevada, una cursilería o una niñada, yo les preguntaré: -¿y poqué? (no falta la "r").
Como volver a ser un niño:
- Construye un carro con rulemanes.
- Camina descalzo por el patio.
- Escucha una canción que te guste a todo volumen, una y otra vez.
- Marca las ies con caritas o corazones.
- Cuenta cada baldosa mientras caminas.
- Pídele a alguien que te lea un cuento.
- Usa esa remera que tanto te gusta aunque no concuerde con el resto de tu vestimenta.
- Esconde las arvejas ( la legumbre que no te guste) debajo de la servilleta.
- Súbete a un árbol y lanza un grito.
- Ríete a caracajadas aunque sea de pavadas.
- Haz ruiditos al pasar las páginas de un libro o revista.
- Ve al kiosko de Yoli y pregúntale: ¿qué me alcanza con dos pesos?.
- Pregúntale a un amig@ mayor que tu como hay que besar a l@s chic@s.
- Pídele a tu esposa que te lleve al bar donde te esperan tus amigos y... que no te deje en la puerta, por fi!
- Intenta cantar "onomatopéyicamente" mientras te das una ducha.
- Da un paseo en bicicleta con tu hijo. Asegúrate de poner globitos para que golpeen contra los rayos.
- Deja, por un día, el hábito de analizar toda tu vida y la del mundo entero.
- Vuelve a leer una historia de Sandokán o de Sissi (de la Colección Billiken).
- En tu hora libre del trabajo, juega a la rayuela, al elástico o compra unas figuritas y desafía a tus colegas.
- Por último, antes de acostarte, fíjate debajo de la cama si no hay algún monstruo escondido y aprovecha "ese miedo" para abrazarte muy fuerte a tu amor.
-Jamás pierdas la imaginación ni las ganas de seguir imaginando.
ResponderBorrar-Busca un charco para saltar sobre él sin haberte puesto botas de agua.
-Construye un tirachinas y busca unas cuantas latas para disparar contra ellas.
consejos para los niños
ResponderBorrarsaquemos el niño que llevamos dentro
ResponderBorrar